Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA) y el Comité Olímpico Internacional (COI) deben demostrar un compromiso con los derechos humanos universales prohibiendo que Estados Unidos e Israel organicen o participen en eventos deportivos internacionales

Estados Unidos se ha vuelto peligroso para los miembros de la comunidad global, y específicamente para las personas no blancas/no europeas. El mundo está siendo testigo de violaciones masivas de los derechos humanos y de la Constitución de Estados Unidos, mientras agentes encapuchados que utilizan vehículos sin identificación allanan lugares de trabajo, hogares y lugares de reunión pública para encarcelar y desaparecer a personas negras, morenas e indígenas, y en demasiados casos, negándoles representación legal e información básica sobre su paradero y bienestar a sus familias y abogados.

Bajo la actual administración estadounidense, cualquier persona sospechosa de residir y/o visitar Estados Unidos con o sin documentación "apropiada", incluidos ciudadanos estadounidenses, está siendo acosada, interrogada sobre sus creencias políticas e incluso detenida sin debido proceso. Este ambiente represivo ha creado una sensación de inseguridad y ansiedad para los viajeros a Estados Unidos, incluidos estudiantes e incluso algunos diplomáticos de "naciones extranjeras". Incluso personas en tránsito hacia otros países han sido sometidas a acoso e intimidación.

Pero esto es solo parte de la historia.

Fédération Internationale de Football Association (FIFA) and the International Olympic Committee (IOC) Must Demonstrate a Commitment to Universal Human Rights by Banning the United States and Israel from Hosting or Participating in International Sporting Events.

The United States has become dangerous for members of the global community, and specifically for non-white/non-European people. The world is witnessing massive violations of human rights and the Constitution of the United States as masked agents using unmarked vehicles raid work places, homes, and places of public assembly to incarcerate and disappear Black, Brown, and Indigenous people and, in too many cases, denying them legal representation and basic information as to their whereabouts and wellbeing to their families and attorneys.

Under the current U.S administration anyone suspected of residing in and/or visiting the United States with or without “proper” documentation, including U.S. citizens, are being harassed, questioned about their political beliefs and even detained without due process. This repressive environment has created a sense of insecurity and anxiety for travelers to the U.S. including students, and even some diplomats of “foreign nations.” Even individuals while in transit to other countries have been subjected to harassment and intimidation.

But this is just part of the story.

The State of Israel, with direct assistance from the United States, is committing gross and profound violations of human rights and international law through military adventures carrying out an ongoing genocide in additiona to other war crimes including, but not limited to collective punishment and starvation. This on top of Israel’s eight decade pogrom of apartheid against the Palestinian people, as well as a perpetual disregard for the sovereignty and self determination of the Lebanese, Yemeni, Syrian, and Iranian people and their respective governments and bodies of leadership. The global community, everyday, witnesses Israel’s wanton slaughter of people and pillage of lives with the full endorsement of the United States who continues to fund, arm, and promote Israel’s tactics of terror and barbarity.

Both FIFA and IOC have previously denied the hosting of, and participation in international events for nations and governments who have acted in ways they deem antithetical to their stated core values of human rights, anti-discrimination and global sustainability. For instance, both IOC and FIFA banned both Germany and Japan from international competition following the second world war. Additionally, IOC banned the Republic of South Africa from participating in the Olympic Games from 1964 to 1992 due to the nation’s racist system of apartheid, and, FIFA banned the nation from participating in its matches between 1961 and 1992 for the same reason. And, more recently, the IOC has instituted a standing ban on the Russian Federation from participating in its summer and winter games due to what is deemed as an illegal invasion and occupation of Ukraine.

This raises the question as to why FIFA and IOC are affording the United States and then State of Israel with preferential treatment over other nations who have been and are currently sanctioned and banned from competition and the hosting of international sporting events for violations of the core values of both bodies.

Therefore, we, the undersigned, as members of the global community and people/institutions of conscience demand that FIFA and IOC withdraw the United States and State of Israel from hosting or participating in international competition events until such time that both nations demonstrate a willingness to adhere to each agency’s core values and further operate in ways that adhere to international law and human rights.

En Español:

Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA) y el Comité Olímpico Internacional (COI) deben demostrar un compromiso con los derechos humanos universales prohibiendo que Estados Unidos e Israel organicen o participen en eventos deportivos internacionales

Estados Unidos se ha vuelto peligroso para los miembros de la comunidad global, y específicamente para las personas no blancas/no europeas. El mundo está siendo testigo de violaciones masivas de los derechos humanos y de la Constitución de Estados Unidos, mientras agentes encapuchados que utilizan vehículos sin identificación allanan lugares de trabajo, hogares y lugares de reunión pública para encarcelar y desaparecer a personas negras, morenas e indígenas, y en demasiados casos, negándoles representación legal e información básica sobre su paradero y bienestar a sus familias y abogados.

Bajo la actual administración estadounidense, cualquier persona sospechosa de residir y/o visitar Estados Unidos con o sin documentación "apropiada", incluidos ciudadanos estadounidenses, está siendo acosada, interrogada sobre sus creencias políticas e incluso detenida sin debido proceso. Este ambiente represivo ha creado una sensación de inseguridad y ansiedad para los viajeros a Estados Unidos, incluidos estudiantes e incluso algunos diplomáticos de "naciones extranjeras". Incluso personas en tránsito hacia otros países han sido sometidas a acoso e intimidación.

Pero esto es solo parte de la historia.​

El Estado de Israel, con asistencia directa de Estados Unidos, está cometiendo graves y profundas violaciones de los derechos humanos y del derecho internacional mediante aventuras militares, y llevando a cabo un genocidio en curso, además de otros crímenes de guerra que incluyen, pero no se limitan a, castigos colectivos y hambruna. Esto se suma a las ocho décadas de pogromo de apartheid de Israel contra el pueblo palestino, así como a un perpetuo desprecio por la soberanía y autodeterminación del pueblo libanés, yemení, sirio e iraní, y sus respectivos gobiernos y cuerpos de liderazgo. La comunidad global es testigo, día tras día, de la matanza indiscriminada y el saqueo de vidas por parte de Israel, con el pleno respaldo de Estados Unidos, que continúa financiando, armando y promoviendo las tácticas de terror y barbarie de Israel.

Tanto la FIFA como el COI han negado anteriormente la sede y la participación en eventos internacionales a naciones y gobiernos que han actuado de maneras que consideran contrarias a sus valores fundamentales declarados de derechos humanos, no discriminación y sostenibilidad global. Por ejemplo, tanto el COI como la FIFA prohibieron a Alemania y Japón competir internacionalmente después de la Segunda Guerra Mundial. Además, el COI prohibió a la República de Sudáfrica participar en los Juegos Olímpicos desde 1964 hasta 1992 debido al sistema racista de apartheid del país, y la FIFA lo excluyó de sus competiciones entre 1961 y 1992 por la misma razón. Y, más recientemente, el COI ha establecido una prohibición permanente contra la Federación Rusa para participar en sus juegos de verano e invierno debido a lo que se considera una invasión y ocupación ilegal de Ucrania.

Esto plantea la pregunta de por qué la FIFA y el COI están otorgando a Estados Unidos y al Estado de Israel un trato preferencial sobre otras naciones que han sido y están actualmente sancionadas y prohibidas de competir y albergar eventos deportivos internacionales por violaciones de los valores fundamentales de ambos organismos.

Por lo tanto, nosotros, los abajo firmantes, como miembros de la comunidad global y personas/instituciones de conciencia, exigimos que la FIFA y el COI retiren a Estados Unidos y al Estado de Israel de la organización o participación en eventos de competencia internacional hasta que ambas naciones demuestren voluntad de adherirse a los valores fundamentales de cada agencia y además operen de manera acorde al derecho internacional y los derechos humanos.

Em português:

A Federação Internacional de Futebol (FIFA) e o Comitê Olímpico Internacional (COI) Devem Demonstrar Compromisso com os Direitos Humanos Universais, Proibindo os Estados Unidos e Israel de Sediar ou Participar de Eventos Esportivos Internacionais

Os Estados Unidos tornaram-se perigosos para os membros da comunidade global, especialmente para pessoas não brancas/não europeias. O mundo testemunha violações massivas dos direitos humanos e da Constituição dos Estados Unidos, com agentes mascarados, utilizando veículos sem identificação, invadindo locais de trabalho, residências e locais de reunião pública para encarcerar e fazer desaparecer pessoas negras, pardas e indígenas e, em muitos casos, negando-lhes representação legal e informações básicas sobre seu paradeiro e bem-estar para suas famílias e advogados.

Sob a atual administração dos EUA, qualquer pessoa suspeita de residir e/ou visitar os Estados Unidos com ou sem a documentação "adequada", incluindo cidadãos americanos, é assediada, questionada sobre suas convicções políticas e até mesmo detida sem o devido processo legal. Esse ambiente repressivo criou uma sensação de insegurança e ansiedade para viajantes aos EUA, incluindo estudantes, e até mesmo alguns diplomatas de "nações estrangeiras". Até mesmo indivíduos em trânsito para outros países têm sido submetidos a assédio e intimidação.
Mas isso é apenas parte da história.

O Estado de Israel, com assistência direta dos Estados Unidos, está cometendo violações graves e profundas dos direitos humanos e do direito internacional por meio de aventuras militares e de um genocídio contínuo, além de outros crimes de guerra, incluindo, entre outros, punição coletiva e fome. Isso se soma ao pogrom de apartheid de Israel contra o povo palestino, que já dura oito décadas, bem como ao desrespeito perpétuo à soberania e autodeterminação dos povos libanês, iemenita, sírio e iraniano e de seus respectivos governos e órgãos de liderança. A comunidade global testemunha, todos os dias, o massacre desenfreado de pessoas e a pilhagem de vidas por Israel, com o total apoio dos Estados Unidos, que continuam a financiar, armar e promover as táticas de terror e barbárie de Israel.

Tanto a FIFA quanto o COI já negaram a realização e a participação em eventos internacionais de nações e governos que agiram de maneiras que consideram antitéticas aos seus valores fundamentais declarados de direitos humanos, antidiscriminação e sustentabilidade global. Por exemplo, tanto o COI quanto a FIFA baniram a Alemanha e o Japão de competições internacionais após a Segunda Guerra Mundial. Além disso, o COI proibiu a República da África do Sul de participar dos Jogos Olímpicos de 1964 a 1992 devido ao sistema racista de apartheid do país, e a FIFA proibiu o país de participar de suas partidas entre 1961 e 1992 pelo mesmo motivo. E, mais recentemente, o COI instituiu uma proibição permanente à Federação Russa de participar de seus jogos de verão e inverno devido ao que é considerado uma invasão e ocupação ilegais da Ucrânia.

Isso levanta a questão de por que a FIFA e o COI estão concedendo aos Estados Unidos e ao Estado de Israel tratamento preferencial em relação a outras nações que foram e estão atualmente sancionadas e proibidas de competir e sediar eventos esportivos internacionais por violações dos valores fundamentais de ambos os órgãos.

Portanto, nós, abaixo assinados, como membros da comunidade global e pessoas/instituições de consciência, exigimos que a FIFA e o COI retirem os Estados Unidos e o Estado de Israel da organização ou participação em eventos de competição internacional até que ambas as nações demonstrem disposição para aderir aos valores fundamentais de cada agência e continuar a operar de maneiras que respeitem o direito internacional e os direitos humanos.